Saben que las orgías son mi fetiche, junto con un millón de cosas mas que no vienen al caso.
Esta vez era raro, Abril intenta explicarme por teléfono que un cliente quería vernos a las 2 juntas, LITERALMENTE, JUNTAS en TODO sentido.
Abril: - Nena, como siempre hay buena plata, la única cagada es que nos quiere ver juntas, no se si te gustara a vos.
Yo:- Y bueno nena, sabes lo que pasa cuando estamos juntas, lo que genera, es un desconche lindo así que, mas por la plata que me comentas, decile que venga a mi loft. Pasale dirección avisame la hora.
Listo se concreta, trío a las tres de la tarde de un 3-3-11.
Ya sabíamos quien era este señor, ya nos había tocado una vez estar con él a ambas.
No les puedo explicar la química que tenemos con Abril para hacer este tipo de cosas, nisiquiera con cualquier otra de las chicas podría.
Abril ya en casa esperando al señor, estábamos preparando los outfits que usaríamos, cada una con sus juguetes y demás, pensando como empezaríamos, o dejando que las cosas fluyan sin ninguna antelación. Así me gusta a mi.
Llega, charlamos un rato como para entrar en clima (hasta ahora no me paso que algún cliente toque la puerta y ya entre con la pija parada).
Abril tiene esas cosas que cuando menos te lo imaginas la tenes encima haciéndote ver las estrellas, a mi y al señor obvio.
De un momento a otro estaba con un pito en el medio de las tetas, haciendo una turca, mientras que Abril me chupaba, era una sensación extrañisima, era satisfacción, era calentura, era morbo, era escuchar absolutamente todos los ruidos que hacían nuestros cuerpos, era dar y recibir.
La cosa se iba poniendo cada vez mas caliente, después de que el señor acabara la primera vez solo con la Turca que le estaba haciendo yo (yo acabando por la genialidad de los movimientos lingüísticos de Abril), él se queda mirando como yo agarraba a abril de los pelos, la sacaba de ese sector para besarla, chuparla, lamerla, hacerla mas mía que de ella.
La posición fetiche de todos, la tijereta, comienza a formarse entre nosotras, un circulo vicioso (por un momento me olvide del cliente, que en este momento estaba tirado en un sillón tocándose mientras nos miraba) mientras que nos rozábamos, nos estirábamos para tocarnos al mismo tiempo, nos deshacíamos por estar estar entrelazadas la una con la otra, la química que había entre nosotras me hacia vibrar demasiado. No había forma de que termináramos, nos necesitábamos.
Me puse mi cinturón y con eso empecé a penetrarla, primero suave, después le tome el gusto y comencé a ir mas y mas rápido, me empecé a calentar yo mirando como entraba y salia.
Mirar como Abril llegaba al orgasmo mientras que YO la penetraba era alucinante, tanto que pase mi mano por debajo del cinturón y comencé a tocarme.
Esta situación la vio él señor, y queriéndome ayudar se acercó metió su mano debajo y comenzó el a tocarme, en el mismo ritmo que Yo entraba y salía de Abril.
Terminamos con eso y entre los 3 nos entrelazamos otra vez intentando una suerte de orgía, el poniéndomela a mi y Abril con el cinturón a él. Así estuvimos largos minutos disfrutando el uno del otro, teniendo placer el uno con el otro, tratando de darnos lo que buscábamos.
Cuando terminamos, el señor se fue, entre nosotras quedo una atmósfera extraña, ahora sabemos lo que nos gusta, sabemos darnos placer. Sabemos que nos gustamos en la cama.
Nos saludamos con un beso interminable. Así como si fueramos amantes.
Esta vez era raro, Abril intenta explicarme por teléfono que un cliente quería vernos a las 2 juntas, LITERALMENTE, JUNTAS en TODO sentido.
Abril: - Nena, como siempre hay buena plata, la única cagada es que nos quiere ver juntas, no se si te gustara a vos.
Yo:- Y bueno nena, sabes lo que pasa cuando estamos juntas, lo que genera, es un desconche lindo así que, mas por la plata que me comentas, decile que venga a mi loft. Pasale dirección avisame la hora.
Listo se concreta, trío a las tres de la tarde de un 3-3-11.
Ya sabíamos quien era este señor, ya nos había tocado una vez estar con él a ambas.
No les puedo explicar la química que tenemos con Abril para hacer este tipo de cosas, nisiquiera con cualquier otra de las chicas podría.
Abril ya en casa esperando al señor, estábamos preparando los outfits que usaríamos, cada una con sus juguetes y demás, pensando como empezaríamos, o dejando que las cosas fluyan sin ninguna antelación. Así me gusta a mi.
Llega, charlamos un rato como para entrar en clima (hasta ahora no me paso que algún cliente toque la puerta y ya entre con la pija parada).
Abril tiene esas cosas que cuando menos te lo imaginas la tenes encima haciéndote ver las estrellas, a mi y al señor obvio.
De un momento a otro estaba con un pito en el medio de las tetas, haciendo una turca, mientras que Abril me chupaba, era una sensación extrañisima, era satisfacción, era calentura, era morbo, era escuchar absolutamente todos los ruidos que hacían nuestros cuerpos, era dar y recibir.
La cosa se iba poniendo cada vez mas caliente, después de que el señor acabara la primera vez solo con la Turca que le estaba haciendo yo (yo acabando por la genialidad de los movimientos lingüísticos de Abril), él se queda mirando como yo agarraba a abril de los pelos, la sacaba de ese sector para besarla, chuparla, lamerla, hacerla mas mía que de ella.
La posición fetiche de todos, la tijereta, comienza a formarse entre nosotras, un circulo vicioso (por un momento me olvide del cliente, que en este momento estaba tirado en un sillón tocándose mientras nos miraba) mientras que nos rozábamos, nos estirábamos para tocarnos al mismo tiempo, nos deshacíamos por estar estar entrelazadas la una con la otra, la química que había entre nosotras me hacia vibrar demasiado. No había forma de que termináramos, nos necesitábamos.
Me puse mi cinturón y con eso empecé a penetrarla, primero suave, después le tome el gusto y comencé a ir mas y mas rápido, me empecé a calentar yo mirando como entraba y salia.
Mirar como Abril llegaba al orgasmo mientras que YO la penetraba era alucinante, tanto que pase mi mano por debajo del cinturón y comencé a tocarme.
Esta situación la vio él señor, y queriéndome ayudar se acercó metió su mano debajo y comenzó el a tocarme, en el mismo ritmo que Yo entraba y salía de Abril.
Terminamos con eso y entre los 3 nos entrelazamos otra vez intentando una suerte de orgía, el poniéndomela a mi y Abril con el cinturón a él. Así estuvimos largos minutos disfrutando el uno del otro, teniendo placer el uno con el otro, tratando de darnos lo que buscábamos.
Cuando terminamos, el señor se fue, entre nosotras quedo una atmósfera extraña, ahora sabemos lo que nos gusta, sabemos darnos placer. Sabemos que nos gustamos en la cama.
Nos saludamos con un beso interminable. Así como si fueramos amantes.
